sábado, 20 de agosto de 2011

LA PIEDRONA

La posa llama La Piedrona (Fotografía tomada en la década del 1970 proporcionada
por  el abogado José Doroteo Cruz)
Uno de los lugares emblemáticos en el municipio de Victoria, Yoro, antes de que apareciera el huracán Mitch es el lugar conocido como La Piedrona, ubicado en el río Sulaco, (llamado río Grande cuando pasa por el municipio de Victoria), este era el sitio preferido de los bañistas mas atrevidos.
La Piedrona fue una posas de las más hondas y allí sobresalía una piedra de grandes dimensiones, llamada La Piedrona, en este lugar se bañaban los hombres y mujeres más expertos.
Los bañistas menos expertos se bañaban en el lugar conocido como La Piedrita, una posa menos honda y que estaba a una distancia aproximada de 150 metros.
El compositor e interprete José Ubener Dominguez
La Piedrita, dejó de existir por culpa del huracan Mitch, que asotó Honduras en la última semana de octubre y primera de noviembre del 1998.
A inmediaciones de la Piedrita, se encuentra otra posa y porque en este  lugar a una distancia aproximada de 200 metros aún existe otra piedra, llamada La Remoñosa, con aguas tranquilas y frencuentada por los vecinos de este lugar y los menos expertos, lo de Remoñosa es porque esta piedra tiene una serie de agujeros.
Cuando en Octubre y noviembre de 1998, llegó el huracán Mitch, su destrucción fue tal que arrazó con muchos lugares turísticos de este río, aterró a La Piedrona, se llevó a La Piedrita y La Remoñosa quedó aterreda.
José Ubener Dominguez, compositor, maestro de educación musical y micro empresario musical, escribió y musicalizó la canción La Piedrona, como un homenaje a generaciones que en excursiones visitaban este mítico lugar, donde las mujeres bellas lucían trajes de baño de una y dos piezas y, se conformaban con darse un chapuzón en la orilla, y de allí refrescaban la vista viendo lanzarse de la cúspide de La Piedrona a tritones y sirenas con lanzamientos acrobáticos. 


LA PIEDRONA.
Letra y música de José Ubener Dominguez

Hace mas de tres décadas,
que en mi bella y galana Victoria
encaminaba mis pasos a un lugar especial,
era un paraje lleno de encantos naturales
que los visitantes admiraban cada ves.

Me refiero a mi río Sulaco,
donde el viento silva en su son y sus aguas
que son cristalinas al turista causan sensación.
La Piedrona no hay otra igual.

Hoy  muy triste recuerdo
aquel tiempo cuando erguía
mi frente hacia el sur,
a una posa fría y transparente
que inundaba el susurro mi piel.

La Piedrona no hay otra igual.
Compatriota si amas a mi pueblo
no destruyas la flora y la fauna,
porque se que en este nuevo milenio
un desierto precoz nos espera.

La Piedrona no hay otra igual.
La Piedrona no hay otra igual,
La Piedrona no hay otra igual y otra iguaaaaaaal. 

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