Desde hace dos semanas y en especial a partir del viernes anterior Honduras regresó a su rutina: muchas muertes por la violencia y por accidentes de tránsito, muchos retenes policiales ha dejado de operar, esto refleja que las estrategias fracasan porque nunca existieron, hay más importancia en tediosas campañas políticas donde las pocas voces no son escuchadas, cada entrega de alimentos e inauguración de una clínica de clasificación de pacientes de acuerdo a las urgencias médicas se convierte en un evento político.
La semana que finalizó se dieron hechos lamentables por culpa del Covid-19 como la muerte de padres e hijos de una misma familia, familias enteras en cuarentena porque no respetaron las medidas de prevención, así mismo familias enteras vencieron el coronavirus e inician un proceso de recuperación de las secuelas de ésta enfermedad.
Son mucho más las muertes diarias del Covid-19 en Honduras, únicamente reportan las ocurridas en hospitales públicos de la capital de Honduras Tegucigalpa y "de los hospitales regionales no se reportan" declaró el doctor Carlos Umaña a canal seis de la ciudad de San Pedro Sula, en el Norte de Honduras.
El domingo se reportaron cuatro fallecidos: Uno en las clínicas del Instituto Hondureño de Seguridad Social y tres en el Hospital Escuela Universitario. Mientras la información generada en la cadena de radio y televisión reveló las muestras hechas por el Laboratorio Nacional de Virología:
Pruebas procesadas: 1,169.
Pruebas positivas: 529.
Total de pruebas positivas: 60,174.
Muertes: 16.
Total de muertes: 1,858.
Pacientes en las Unidades de Cuidados Intensivos: 43.
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