GRACIAS DIOS POR ESTOS MOMENTOS INOLVIDABLES.

GRACIAS DIOS porque llegó este momento lo cual representaba un reto muy grande en una festividad que recuerdo como mi amada se afanaba con los menú, el permitir  compartir en familia la noche del 24 de diciembre del 2019 en esta ocasión en uno de los sectores de la ciudad de Gijón, Asturias, España, a muchos kilómetros de Honduras y en la mesa fue gratificante escuchar planes al futuro, el esfuerzo de quienes hicieron posible éste evento fue un éxito,  y que siga repitiéndose porque los triunfos llegan no por arte de magia sino cuando la familia cultiva los principios del amor, responsabilidad, solidaridad y otros más.

El intercambio de regalos pasa a segundo plano, lo que perduran son las experiencias que se comentarán siempre y será motivo para que vengan más reuniones con la familia, al final en todo momento los tuyos estarán en los momentos de victorias y tempestades.
Fue maravilloso cuando cae una llamada de mi primogénito nieto que se despojó de la timidez, y se soltó en una plática que no descuidó el más mínimo detalle recordando que se estuviera pendiente de la preparación de los bocadillos que en ese instante se cocinaban y que se compartieron en la  cena Navideña.
Es válido quienes derraman lágrimas cuando llaman a sus familiares y saben que desde que salieron sufrieron en carne propia los problemas que enfrentaron, y les extrañan y muchos tuvieron que esperar abandonar  su seno para darle el valor a la familia.