Cuando hay amor no hay quien lo evite y eso fue lo que lo ocurrió a inicios del año de 1910 mi abuelo Arnulfo "Nufito" Soto, originario de Guayape, Olancho, Honduras. Llegó a Victoria departamento de Yoro Honduras siguiendo a el amor de su vida Petronila "Mayes" Bejarano y, rompió así las barreras que le impusieron los padres de su enamorada.
En la vida se van encontrando testimonios de parejas que evidencian que el amor es más fuerte que la naturaleza. Más méritos tiene la relación de estos enamorados cuando no existía Facebook, Wasat, Skype, Twitter o otras redes sociales.
Los padres del amor de su vida para que su amada no se uniera al joven Arnulfo Soto, luego que no encontraron en Guayape, Olancho la forma de evitar el romance, creyeron que mandándo a su hija a vivir a Victoria Yoro Honduras lograrían romper la unión amorosa. El apuesto joven Arnulfo "Nufito" Soto no cumplía los requisitos que exigían los padres para su hija.
El cabellero Arnulfo Soto-para más señas mi abuelo al enterarse hasta a donde habían enviado a su amor, y sin pensar en la travesía que tenía que atravesar con muchos días de aventura viajó al municipio de Victoria departamento de Yoro Honduras donde ambos al final se unieron. El amor lo puede todo.
El joven Arnulfo "Nufito" Soto se dedicó al destazo en el rastro, llamado "La Pesa" que estaba ubicada donde hoy funciona la Casa del Adulto mayor Caridad de Zúniga, ubicado a un costado del nuevo templo católico, donde atendía a las mejores familias y les complacía con los mejores cortes de carnes de ganado vacuno y porcino, esa fue una de las razones por las que se ganó el respeto y cariño de las familias pudientes de éste municipio. También Soto se dedicó a la reparación de calzado de todos los estilos, también los fabricaba.
Arnulfo "Nufito" Soto era de mediana estatura, piel oscura, contextura delgada. Su educación fue tal que la población lo respetaba y las autoridades cuando ingería bebidas alcohólicas no tomaban medidas contra el cuando hechaba vivas al partido Liberal, especialmente la familia Cubas le protegió, los Cubas fueron por décadas quienes hacían y deshacían contra los Liberales.
Mientras Arnulfo "Nufito" Soto fue de piel oscura y que en Victoria Yoro Honduras en lugar de decir Negrito, llamaban a los negritos: "Prietos", "Morados". El amor de su vida Petronila "Mayes" Bejarano era de piel blanca.
Petronila "Mayes" Bejarano, era una joven alta, elegante, blanca. Quienes le conocieron sostienen que fue una mujer muy bonita, de buenos modales y proveniente de una familia culta y poseedora de Bienes en el departamento de Olancho.
Soto toda su vida fue un fiel seguidor del partido Liberal de Honduras, fue al único que se le permitió dar vivas al a ese instituto político y no recibía reprimenda alguna, en cambio a otros seguidores "colorados" al instante que realizaron vivas al partido Liberal iban a parar al "bote", "mamo" ó cárcel y para recuperar libertad pagaban la respectiva multa o sanción pecuniaria.
Finalmente el amor lo puede todo, cuando es puro no hay barreras que lo impida es el caso de los jóvenes Petronila "Mayes" Bejararo y Arnulfo "Nufito" Soto, a quienes sus familiares a toda costa impidieron la unión. Ambos jóvenes viajaron desde Guayape, Olancho y el destino y el amor los unió en Victoria Yoro Honduras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario