En el municipio de Victoria departamento de Yoro Honduras es lunes 27 de julio del año 2020, todo transcurre normalmente y las medidas de prevención fueron estrictas al inicio de la pandemia que hasta la cárcel fueron llevados quienes no usaban mascarilla o tapaboca y circulaban después de las cinco de la tarde.
El cura del municipio en una de sus homilías hace unas semanas se quejó que hasta encuentros de fútbol se juegan en las aldeas, aquí como dicen muchos es otro mundo. Así como en otros lugares de Honduras y Latino América una minoría cumplen con las normas para prevenir el mortal COVID-19, la mayoría por falta de educación hace caso omiso a llevar la mascarilla o guardar la distancia.
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