
Nunca se ha visto en este municipio, el gran numero de vacacionistas proveniente de otras regiones y el reencuentro de originarios de este municipio que durante muchos años estuvieron separados.
Los lugares preferidos por los veraneantes fueron las playas del río Sulaco y las piscinas del Ojo de Agua, a las horas picos registraron llenazos sin precedentes donde los bañistas corrían de u lugar a otro buscando lugares donde instalarse.


Mientras las piscinas del hotel Quinta Las Princesas, el acceso de los exc
ursionistas fue menor, porque el uso de las mismas era de uso exclusivo de los usuarios de sus habitaciones, y cuando el ingreso era permitido, los veraneantes lo hicieron.

En este balneario no se venden bebidas alcohólicas, los propietarios fueron anuentes para que los veraneantes se las ingeniaron para ingresar cervezas y otras bebidas.
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