Cortesía de Cadena Radial del Centro del dde Yoro, Honduras.
Marcos Chávez, el cantautor de la montaña que canta por la naturaleza.
Sulaco, Yoro. El maestro Marcos Chávez, conocido como “el cantautor de la montaña”, se ha convertido en una voz comprometida con la protección del medio ambiente y la conciencia ecológica a través de su música.
A sus 59 años de edad, Chávez continúa componiendo canciones inspiradas en la preservación de la naturaleza y en la necesidad de amortiguar los efectos del calentamiento global. Temas como “El Venado”, “A Sembrar un Árbol”, “El Maderero”, “Mico Quemado” y otros, han llevado mensajes de reflexión a miles de hondureños, promoviendo el amor y respeto por la tierra.
Su labor no se limita a la composición: también ha realizado conciertos educativos en numerosos centros escolares del norte del país, utilizando la música como herramienta para educar y motivar a los jóvenes sobre la importancia de cuidar el entorno natural.
Originario de San Antonio, Sulaco, hijo de doña Victorina Domínguez y don Amílcar Chávez (Q.D.D.G.), el artista cursó sus estudios secundarios en el Instituto José Antonio Ochoa de Victoria, donde pasó gran parte de su infancia. Posteriormente ingresó a la Escuela Nacional de Música en Tegucigalpa, y más tarde se trasladó a El Progreso, ciudad donde alcanzó su formación superior.
Allí fue contratado por varios centros educativos y contrajo matrimonio con la licenciada Gina Maldonado, con quien procreó una hija.
Actualmente, el maestro Marcos Chávez labora como docente en el Instituto Eduardo H. Chávez de El Progreso, donde es considerado uno de los profesores más queridos y admirados por sus estudiantes.
Además de su faceta ecológica, Chávez contribuye al fortalecimiento del turismo hondureño con composiciones como “Lancetilla” y “Copán”, piezas que exaltan la belleza natural y cultural del país, así como canciones que promueven la unidad familiar y la hermandad nacional.
Su talento lo ubica dentro de la generación de cantautores hondureños destacados, junto a figuras como Polache, Javier Montiel, Pilo Tejeda, Moisés Canelo y el recordado Guillermo Anderson (Q.D.D.G.).
Chávez asegura que encuentra su inspiración en lugares solitarios, como las orillas de los ríos, las playas o las montañas, donde —según sus propias palabras— “las palabras fluyen solas, acomodándose al ritmo melódico”.
Dotado de una profunda sensibilidad artística, no solo es compositor, sino también músico, formado en la Escuela Nacional de Música de Honduras, donde perfeccionó su dominio del teclado y la guitarra.
En los últimos meses, el cantautor ha renovado su estilo escénico, presentándose con sombrero, cumbo y accesorios típicos del campesino hondureño, elementos inspirados en la memoria de su padre y en las raíces rurales que han marcado su vida y su obra.
Con su arte, Marcos Chávez sigue demostrando que la música puede ser una poderosa herramienta para educar, inspirar y proteger la vida en la Tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario