La canícula en Honduras es un fenómeno climático caracterizado por la disminución temporal de las lluvias durante la temporada de invierno. Cada año presenta variaciones en cuanto a su inicio, duración e intensidad, y en algunos sectores del país puede manifestarse como sequía.
Para este 2025, el fenómeno se presentará de manera anticipada, comenzando el lunes 7 de julio y extendiéndose hasta mediados de agosto.
Esta reducción de lluvias se debe al fortalecimiento de los vientos a aproximadamente 1 kilómetro de altura sobre el Caribe y Centroamérica. Esta aceleración impide el ingreso de humedad desde el océano Pacífico, lo que limita la formación de nubosidad y lluvias.
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