JERÔME BOATENG: " El regate de Messi, fue duro (risas) Me paré frente a él y de repente desapareció. No supe lo que pasó hasta que me encontré tirado en el suelo, el balón en la portería y Rafinha dentro de la red.
Fue como un huracán que pasó rápido y dejó el caos. Cuando jugué contra él en París, le dije: "Pasan los días y los años y sigues siendo el mejor, Leo". Nos saludamos y me fui. Es un jugador muy humilde y educado, que no habla mucho, pero con el pie. él habla mucho. Ese es él." (Cortesía de redes sociales).
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