Juan Orlando Hernández Alvarado de 55 años de edad, llegó vestido con el uniforme de prisión color canela, acompañado de dos guardias, apoyado en en un bastón, quien ejerció el poder durante ocho años (2014-2022), los últimos cuatro de manera irregular porque la Constitución de Honduras no permite la reelección bajo ninguna modalidad, fue extraditado en abril de 2022 a EE.UU., acusado por Estados Unidos por tres delitos asociados al narcotráfico, por los que el 8 marzo/2024 un jurado lo declaró «culpable».
El juez Kevin Castel en marzo del año 2021 dictó sentencia contra su hermano Juan Antonio Hernández, quien también enfrentó un juicio en Nueva York por narcotráfico.
El exmandatario fue entregado a Estados Unidos, esposado de pies y manos, antes de que se cumplieran tres meses de haber finalizado su segundo mandato, el 27 de enero de 2022.
Estados Unidos hizo lo que le correspondía a un sistema de Justicia de Honduras.
El narcotráfico en Honduras se comenzó a mediados de la década de 1970 y fue creciendo a la vista de todas las autoridades del país, salpicando a la vez a políticos, entre ellos diputados del reciente pasado.
La sentencia de Juan Orlando Hernández de este miércoles, es la primera contra un expresidente de Honduras.
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