Si antes viajar de América aterrizar en el aeropuerto Barajas, de Madrid, España es una odisea porque llegar aquí, te encuentras con una de las entradas más grandes a Europa donde cada minuto despegan vuelos a los otros aeropuertos del Primer Mundo y a otros continentes.
Se inicia con la revisión del pasaporte, revisión de exámenes de COVID, prueba al instante si presentas calentura y comprueban si eres portador del virus del SRAS-CoV-2 ó COVID-19.
Se desciende del avión e inician las carreras para llegar a las oficinas de Migración cumplir con una serie de controles entre ellos quitarse los implementos desde zapatos, faja, maletas y otros artículos personales. Luego si lo haces por primera vez como turista la reservación del hotel, dirección del familiar que se visita y responderá preguntas que fácilmente se cae en contradicción, recuerda que los empleados fueron preparados para estar en las oficinas de migración y las maletas son minuciosamente revisadas por controles electrónicos.
Una vez pasada ésta revisión sales de prisa enmedio del enjambre de viajeros a buscar la terminal si es que tomarás otro avión a leer los pizarras electrónicas que cambian constantemente indicando el número de vuelo y el número de la terminal abordo. Si llegas a Madrid a buscar la salida otro problema por la cantidad de gente que llega a ésta ciudad.
Me toco ser testigo cuando una hondureña abordó el avión el aeropuerto Toncontin de la capital de Honduras Tegucigalpa, quien le revisó la documentación y le preguntó que a qué iba a España? Le contestó que iba a pasear por una semana y llevaba un montón de maletas. Cuándo se preguntó qué por qué viajaba no supo responder y fue presa de los nervios. Regresando a Honduras, para ser más preciso en el aeropuerto de la ciudad de San Salvador, una hondureña de San Pedro Sula en el norte de Honduras dejó escapar una expresión como de tranquilidad "jamás vuelvo a viajar, esto que me ha pasado es para el olvido", luego en el vuelo de San Salvador a Tegucigalpa seguía dando gracias "no sé cómo es que a la gente le gusta viajar, ni quiera Dios lo que he sufrido", sólo pensé a lo mejor no la dejaron ingresar a Europa porque la mayoría sacan préstamos para irse a España a trabajar a cuidar personas de la Tercera Edad y creen que todo es fácil.
Mi recomendación es que pregunten primero por los requisitos para viajar porque al llegar al aeropuerto Barajas si no sabes responder a preguntas te conducen a una oficina a solas y te devuelven a Honduras.
Hay otros aeropuertos como el de Barcelona, París, Roma que son inmensos, pero las revisiones son más tranquilas, lean bien no estoy escribiendo que el ingrwso es fácil, pero en comparación con el de Barajas que es una locura.
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