VIOLENCIA EN HONDURAS

EXTORCIONADOR.

En las ciudades principales los extorcionadores (obligando a sus presas a pagarles dinero a cambio de no hacerle  daño) se multiplican cada día, y muchos convinimos con ellos sin imaginarnos a lo que estamos expuestos.
Mujeres y hombres, dedicados a este oficio, investigan a sus víctimas en una manera profesional, y luego llaman por teléfono u otro medio, para intimidar y obligarlos a pagar sumas de dinero, los negocios están desapareciendo por este maldito quehacer de los delincuentes.
Uno de los diarios de mayor circulación en Honduras-La Tribuna, el lunes 11 de junio publico dos páginas con la fotografías de los extorcionadores hombres y mujeres, unos libres y otros guardando prisión.
Todo iba bien, leyendo los titulares de las noticias generales, enterándome de lo que pasa en el Europa, pero todo cambia cuando al revisar la publicación de un noticia a dos página y descubro que uno de los mas temibles extorcionadores, es un conductor de un taxi que en varias ocasiones le vi, me saludó y en mas de un ocasión le abordé para que me hiciera una carrera, y como hacen la mayoría de los pasajeros cuando utilizamos este medio de transporte, entablé una plática de lo que ocurre cada día.
Gracias Dios, porque este señor que adorna las páginas de este diario, no atentó contra vida y me prolongó mi existir, y esto me anima a disfrutar de mi familia, amigos y las lindas cosas que tengo  a mi alrededor.
Estoy sorprendido, nervioso y gracias a Dios que compré el diario, porque normalmente desde que utilizo el Internet, ya no compro los diarios, los reviso a través de este medio.
En una convulsionada Honduras por la violencia, sea cauto y hable lo necesario, porque puede que le pase lo que a mi ocurrió, que este cerca de usted un peligroso delincuente y estas "mansas palomas", mostrando su habilidad le lleven al camino de las consecuencias de la delincuencia que hoy esta en todo lugar en esta nación latinoamericana.
En mas de una ocasión por necesidad abordo y luego tengo que bajarme de un taxi o bus rapidito (buses pequeños, la mayoría operando irregularmente que circulan normalmente en varias ciudades de Honduras y las autoridades hasta les convocan a reuniones de trabajo en oficinas públicas), porque se subieron personas que infunden miedo y su apariencia es parecido a delincuentes.