La joven Sandra Elizabeth de León Zuniga, de 36 años edad mantiene sus dos hijos: Alejandra y Néstor, con las ganancias que le dejan dos trabajos en Victoria Yoro Honduras.
Sentada en su lugar de trabajo saboreando un plato de arroz chino, bebiendo una Coca cola y escuchando la inocencia de su menor ante la vista y paciencia de clientes que ingresan al mercadito Dany y, el bullicio de vehículos que pasan enfrente de este lugar, así es la vida de una hondureña que lucha por mantener a una adolescente y un infante.
La opuesta joven de León Zúniga inició desde hace 14 años en el negocio de la venta de accesorios de la telefonía celular. Al inicio con el padre de sus dis hijos, luego continuó en dicho emprendimiento sola porque su compañero de hogar le abandonó.
Para generar más ingresos trabaja preparando los alimentos en asilo Caridad Zúniga, donde 12 jóvenes de la tercera edad se les da el desayuno y el almuerzo.
Terminada la jornada en el asilo Caridad Zúniga, continúa en su emprendimiento de la venta de artículos para teléfonos móviles atendiendo enfrente del mercadito Dany a la par de la iglesia católica en el barrio Abajo dek casco urbano del municipio de Victoria Yoro Honduras.
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